El Gobierno bonaerense advirtió que el plan económico de Javier Milei ya genera impactos críticos en el empleo, los salarios y la inversión pública en la Provincia. La recesión afecta con fuerza a las familias y tensiona el escenario social.
El ajuste nacional golpea con fuerza a la Provincia de Buenos Aires. Según datos del Ministerio de Economía bonaerense, la desocupación trepó al 8,7% durante 2024, con una suba de 1,3 puntos en comparación al año anterior. Los distritos más afectados son los del conurbano, donde el desempleo en el GBA escaló al 8,8%, y el Gran La Plata, que saltó al 9%. También se registraron retrocesos en Mar del Plata, Bahía Blanca y el norte provincial, reflejando un deterioro generalizado del mercado laboral.
Además del desempleo, los ingresos se desploman. El informe oficial señala que los salarios reales cayeron un 16,6% promedio en el primer tramo del año, con una baja aún mayor en el sector informal, que perdió más del 20%. Las jubilaciones tampoco escaparon: la mínima retrocedió un 18,7% en términos reales. “Hay menos trabajo y peor remunerado”, advirtió el ministro Pablo López, quien alertó por la caída del consumo y su impacto directo sobre la actividad económica.
Desde La Plata, el Gobierno provincial volvió a cuestionar el rumbo económico nacional. “Este modelo está destruyendo el trabajo argentino”, sostuvo López. Según detalló, el ajuste ya provocó un recorte del 14,1% en la inversión pública, afectando especialmente al sector de la construcción y paralizando obras clave para la producción y la logística. Frente a este panorama, el funcionario reclamó una “alternativa productiva” que fortalezca el mercado interno y genere empleo genuino en el territorio bonaerense.
